Estudié tres años de español en la escuela intermedia y la secundaria, y por un rato era fluida en español suficientemente para hablar con los tenderos y la gente en la calle. Desafortunadamente, tengo una mala experiencia con una maestra de español en el décimo grado, y la posibilidad que debería tomar sus clases durante dos años más me inspiró a hacer el cambio a estudiar francés.
Cuando traté de regresar al estudio del español a la universidad, las universidades que asistí enseñaban el español castellano en vez del español latinoamericano con que estaba más familiarizado, y por esta razón (tontamente) no busqué estudiar el idioma español allí. Cuando me gradué unos años despues, aunque todavía podía leer algo de español, perdí casi toda la fluidez que había ganado.
En noviembre de 2020, empezé a usar Duolingo, un software para aprendizaje de idiomas, para reaprender el español latinamericano. En el momento que estoy escribiendo esta página:
- He practicado español en Duolingo por mas de 1 000 días consecutivos, y no la planeado parar.
- He demostrado competencia a todos los niveles de ocho cursos de español, y sigo revisándolos.
- En total, he completado más de 2 500 lecciones en Duolingo.
- Además, en los últimos diez meses, leía, escuchaba, y interactuaba con más de 300 cuentos que Duolingo ofrece fuera de sus lecciones.
- Yo miro—y comprendo la mayoría de—programas de la tele y películas (especialmente cuando yo leo los subtítulos en español). También, yo miro las películas en otras idiomas (p.ej., portugués) con subtítulos en español. Escucho podcasts en español para los estudiantes intermedios o avanzados.
En el año 2024, planeo a hablar español con mis amigos hispanohablante, y quizás contratar a una tutora para aumentar mis habilidades por hablar español. En el futuro, yo espero viajar a México para aplicar y fortalecer mi fluidez.
Como historiadora, ya he usado mis habilidades en español para leer e interpretar cartas del pasado que están escritas en español, par ejemplo las de Ynes Méxia, una botánica de los siglos XIX y XX. Sus cartas son muy graciosas; además de detallar sus aventuras botánicas, ella escribió con mucha franqueza sobre su descontento con su esposo.
Mis metas:
- Desarrollar un nivel de fluidez que me permita comprometer con communidades hispanohablantes.
- Aprender más sobre las culturas latinoamericanas (especialmente en México y el resto de Centroamérica).
- Eventualmente ser completamente bilingüe.